Durante varios días empezaron a aparecer huellas en el suelo de nuestro colegio, no sabíamos quién venía por la noche a nuestras clases. Nos iban dejando cosas sobre el universo: juguetes plateados, mensajes, fotos... hasta que un día por la tarde nos avisaron las conserjes de que había un marciano en la puerta del colegio.
La señorita Toñi salió corriendo y nos informó que había un marciano en el patio. ¿ Queréis que entre? sí...
dijimos todos los niños/as. Cuando todos estábamos sentados y callados, vimos como alguien venía andando muy despacito hasta que pudimos ver su cara y su cuerpo.
El marciano no hablaba, solo emitía sonidos guturales muy raros, pero se comunicaba con nosotros con gestos. Empezó a señalar los carteles que teníamos colgados en el hall y señalaba "El planeta Marte". La señorita le preguntó que si era su casa y él nos dijo que sí con la cabeza.
Le hicimos preguntas y el nos contestaba a todo pero con gestos. No se le veían los ojos y no tenía nariz. Sus manos eran plateadas al igual que sus dedos.
De repente llamó a un niño y cuando este se acercó le tocó la cabeza y el niño nos dijo que sentía calor cuando ponía sus dedos sobre él.
A continuación le pusimos el cartel de los números en español y los fue señalando uno a uno. Le dijimos que nos lo dijera en su idioma y empezó a decir "Oxitron, Eratrom...así hasta que llegó al 10 que es Janofin."
Luego nosotros le dijimos los números en español y él los repitió con su voz retumbante y de una forma muy extraña.
Volvió a llamar a varios niños para que sintieran la energía que les producía al tocarlos.
El único que no sintió nada fue David, no sabemos por qué.
Después de estar aproximadamente 1 hora con nosotros tuvo que marcharse porque había dejado de llover y ya podía volver a su casa. Se despidió muy amablemente y se marchó muy contento, prometiéndonos que otro día volvería.
Fue una tarde maravillosa aunque algunos niños/as no creyeron que era un marciano de verdad. Empezaron a decir que era alguien disfrazado, pero ¿Quién será?........
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